A lo largo de los últimos años se han producido importantes avances a nivel de las evidencias científicas que indican que la periodontitis o enfermedad de las encías, consistente en la inflamación e infección de los ligamentos y huesos que sirven de soporte a los dientes, comparte mecanismos patogénicos con otras condiciones sistémicas, afectando al estado y el funcionamiento del organismo en múltiples aspectos.
En artículos anteriores hemos podido ver cómo los trastornos de la salud de la boca y dientes guardan relación con múltiples patologías, pueden favorecer la aparición y desarrollo de síndromes geriátricos, afectar al tratamiento de la hipertensión, o incluso favorecer el desarrollo de demencias como la enfermedad de Alzheimer, entre otras afecciones.
En línea con estas investigaciones, se han publicado diversos estudios que apuntan a la relación entre la periodontitis y el glaucoma, un conjunto de enfermedades que pueden dañar el nervio óptico y que constituyen la principal causa de ceguera entre las personas mayores de 60 años.
El glaucoma es una neuropatía óptica progresiva y crónica, causada por un mal funcionamiento del ángulo de drenaje del humor acuoso del ojo, el líquido presente entre las cámaras anterior y posterior del globo ocular y que sirve para nutrir y oxigenar las estructuras sin aporte de sangre, como el cristalino y el iris.
El ojo produce humor acuoso constantemente, que fluye y debe drenarse en la misma cantidad que se genera a través de un área llamada ángulo de drenaje. Cuando este drenaje no se lleva a cabo adecuadamente, la presión interior del ojo aumenta y puede ocasionar daños en el nervio óptico.
Pero, ¿existe relación entre la salud bucodental y la aparición del glaucoma? Un estudio piloto desarrollado en la SUNY Downstate Health Sciences University constató que los pacientes con glaucoma de ángulo abierto, el tipo más común y caracterizado por su evolución gradual, tienen menos dientes y una mayor cantidad de estreptococos en la cavidad bucal. En la misma línea, otro trabajo desarrollado en colaboración por investigadores de varias universidades asoció la pérdida dental y el diagnóstico de enfermedad periodontal con un mayor riesgo de glaucoma de ángulo abierto.
Recientemente, y basándose en la identificación de nuevos mediadores inflamatorios implicados en afecciones médicas crónicas asociadas con la periodontitis, un nuevo estudio publicado en el Cureus Journal of Medical Science establece la posibilidad de que las enfermedades periodontales pueden ser un factor de riesgo adicional en el desarrollo de enfermedades oculares como la uveítis, la retinopatía diabética, la degeneración macular relacionada con la edad o el glaucoma.
De nuevo, las evidencias científicas confirman que la salud bucodental guarda relación con otros muchos trastornos a nivel sistémico, por lo que puede afectar al estado general de salud. Y esto adquiere una especialmente en el caso de las personas mayores, en las que nos encontramos muy habitualmente con un mayor número de pluripatologías y un aumento de la cronicidad.
Las enfermedades oculares como el glaucoma pueden suponer un importante impacto en la salud de cualquier persona, y una causa de situaciones de dependencia en los casos en los que se produzca una pérdida importante de visión. Pero en el caso de las personas en situaciones previas de dependencia y/o con problemas de movilidad las consecuencias pueden ser todavía más graves, ya que pueden propiciar un mayor deterioro de la autonomía o incluso su pérdida total.
Por este motivo, y dada la elevada prevalencia de la periodontitis entre las personas mayores que viven en residencias, desde Dental Residency queremos concienciar sobre la necesidad de llevar a cabo revisiones odontológicas periódicas y de fomentar los hábitos de higiene bucodental entre los residentes, a fin de prevenir la aparición o el agravamiento de otras patologías ya existentes, y de preservar no solo la salud, sino también la calidad de vida de los residentes.